Días de Borrasca

Humores que se caldean, discusiones sin sentido con Chèrie en el medio de las reformas para irnos a vivir juntos a fin de año... y su laburo que se transformó de a poco en lo que ya sabía que iba a ser y de a poco va cayendo...
Pese a que la había pasado tan bien en el panel de Terrorismo Gráfico en las jornadas de Diseño de la UP, un chispazo y se nos fue media hora peleando por quién estaba en peores condiciones para ocuparse de un tema tan boludo como una llamada telefónica. Las costillitas de cerdo a la riojana ya amenzaban con caerme como el orto. Para colmo, Gothmog, capitán de los orcos, me rompió el orto en Osgiliath jugando al 3d Age.
Me fui a dormir después de un intento de pacificar las cosas.
A la 1, un putañero pelotudo toca el timbre y me saca de la cama de un salto. El idiota va de putas pero anota mal el piso. No quise putearlo. Nunca se sabe qué tipo de gente puede ir de putas a la 1 de la mañana y tocar mal el timbre.
Ya era tarde: mi estómago estaba arruinado. Me levanté dos veces. La primera a tomar hepatalgina no sé a qué hora. La segunda, directo al alikal.
Me levanté como pude y llegué deliberadamente tarde, como todos estos días.
Llegué y me encuentro con un postit que dice que my former chief me buscaba. Lo llamo. Quería tomar un café. A las 10 estábamos en la oficina del CEO, que estaba deshabitada, hablando del cáncer que se está por comer a su suegro. La situación era increible por eldoble carácter de humano y absurdo. Un director corporativo hablando con una oveja negra, pidiéndole consejos con 10 años de diferencia, sobre cómo llevar adelante una situación traumática como es el cáncer en un ser querido, los dos sentados en el centro neurálgico de las decisiones de una de las principales empresas de este mercado. Y no es que el tipo no haya estado frente a la muerte de un ser querido: su padre, me contó murió de un infarto. Pero esto es bien distinto y en el primero que pensó fue en mí. Me hizo sentir paradójicamente bien. Hablamos casi una hora.
A las 11 estaba en mi escritorio. La PC aún sin encender.
Hoy es el cuarto día sin los jefes. Se fueron todos a unas jornadas de capacitación. El clima que se respira acá es fantástico. Mañana se termina. Vuelven todos.
Mañana es mi cumpleaños. Ojalá estén todos los que quiero.
Mañana me voy a tomar una medida de Absyntha.