"Redoblo cualquier apuesta,
pongo pleno al presente.
Que importa perder la vida
si ni siquiera es mía".
(Bersuit)

Segunda clase del curso sobre la Época Barroca. El orador nos iluminó con la historia de la vida de Caravaggio (tal era su apodo, si bien se llamaba Michelangelo no recuerdo qué, y se suponía que nació en Caravaggio, Italia). Este tipo vivió 40 años, murió en el 1610 si no me falla la memoria (googlearía, pero los datos son meros accesorios, lo que vale es el concepto).
En 1606 ya era demasiado groso, se había codeado con la crème papal de Roma (donde venía residiendo) pintaba para la aristocracia y, mediante técnicas de contrastes y otros elementos propios del sistema barroco (habrá sido conciente que estaba contribuyendo a crear una cultura?), inauguró una cantidad de conceptos en la pintura moderna (como ponerle mugre en las uñas a Abraham en el cuadro que sacrifica a su hijo), además de aferrarse a gestos realistas, alejándose de una concepción idealista del físico humano.
Uno se imagina a un pintor y no puede asociarlo con una vida agitada. Piensa en tipos calmos, mantenidos, delicaditos tal vez. Este sacado se la pasaba, según nos contó el profesor, de taberna en taberna, timbeando y chupando alcohol. Tenía un par de entradas en lo que hoy serían las comisarías, por irse a las manos un par de veces. En una ocasión, circa 1606, se pasó de rosca y se cargó un chabón. Es para mi un misterio como alguien con la sensibilidad suficiente para pintar un cuadro pueda reventar a otro ser humano. Este no. Se lo llevó puesto así, sin más. La historia sigue con sucesivas fugas, escapando de la policía papal ayudado por su protector/mecenas, llegando a Napolés y huyendo todavía más al sur, hasta llegar a la isla de Malta, donde se ordenó caballero de la Orden de Malta (valga la redundante redundancia). Un tipo con su carácter como caballero no iba a durar mucho y, efectivamente, Caravaggio vuelve a cruzar el charco y se instala en Sicilia. Resulta increible agregarle a este relato de un nómade, la nota de color: el tipo donde paraba se la pasaba pintando y recibiendo encargos para que pinte.
Cuando finalmente Roma lo perdona, muere en Nápoles, en el puerto, afectado por una peste que asolaba la ciudad, intentando llegar a la ciudad que lo consagró...
Y yo acá...en un escritorio...escribiendo un blog para matar el tiempo...me preguntó cómo podría darle un poco más de emoción a mi vida...